Las casillas del ajedrez están hechas con chapa de nogal americano para los cuadros negros y chapa de erable para los blancos. Una vez recortados los cuadrados con un cúter se van uniendo unos con otros con unos trocitos de celo.

Bordeando las casillas puse una tira fina de marquetería y como marco exterior más chapa de nogal americano.
La caja y los cajones están realizados con aglomerado DM chapado.
Los soportes interiores de los cajones que acogerán las figuras están hechos de haya maciza. A partir de unos listones de haya que se van perfilando con sucesivos cortes se consigue que cada figura tenga su asiento.
La realización del cajón no tenía ninguna complicación. El tirador lo hice torneando un trocito de madera maciza.
Una vez terminadas todas las partes de la caja y tras un minucioso lijado tocaba barnizar. Este punto fue muy importante en este trabajo. Hasta ahora había barnizado con pistola y con barnices de poliuretano. Hacía semanas que había empezado a probar el barnizado con goma laca y con muñequilla. La goma laca ha sido utilizada toda la vida en ebanistería y actualmente solo se usa en instrumentos de música y muebles muy especiales. Tiene una gran dificultad de aplicación y se necesitan bastantes horas de práctica para empezar a tener resultados aceptables. La muñequilla es simplemente una bola de gasa envuelta en un trozo de algodón que se usa para aplicar la goma laca. En el apartado de webs interesantes hay un tutorial muy bueno y completo sobre esta técnica.
Me lancé a la aventura y usé goma laca para esta caja de ajedrez. Fueron necesarias unas ocho o diez manos. El brillo y la suavidad final del trabajo es realmente sorprendente.












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